
Este pueblo ha permanecido durante siglos en el Pacífico Sur. La región también fue habitada por otros cacicazgos como el Quepo y el Coto. El territorio indígena se ubica en el Cantón de Buenos Aires, Distrito Boruca, en la Provincia de Puntarenas. Habitan en varios poblados, pero la mayoría de la población se concentra en dos comunidades principales, Boruca y Curré. Con relación a su idioma solo se reportan muy pocas personas hablantes, especialmente mayores por lo que, a pesar de los esfuerzos por revitalizarla, de no haber un cambio entre sus pobladores, será dentro de no mucho que pase a ser otra lengua extinta.
La mayor parte de Costa Rica y por ende donde se ubican las comunidades de Boruca y Curré, fue una zona que formó parte de la Región Histórica Chibcha, que comprende pueblos de Panamá, algunas zonas de Colombia, y cuya población hablaba diferentes lenguas de la familia lingüística chibcha. chibcha, que también comprende pueblos de Panamá y algunas zonas de Colombia. El proceso de transculturación del pueblo brunca fue uno de los más tempranos, tanto en la región, como en el resto del país. No fue sino tras varios intentos, en 1604 y 1629, que los frailes franciscanos lograron congregarlos, catequizarlos e imponerles el sistema de tributo de proveedores de servicios para los hatos de mulas, así como de pita, hilo morado y algodón. Chang (2013).
El establecimiento de los misioneros franciscanos en estos territorios es una de las razones por las que esta población indígena vio más amenazada su reproducción cultural. Otro factor de desequilibrio fue la construcción de la carretera Interamericana a mediados del siglo XX, generando hacia este lugar, una fuerte migración de madereros, ganaderos y colonos del Valle Central. Amador (2002).

Son temas desconocidos el sistema tradicional de parentesco y la organización tradicional. En cuanto a la vivienda tradicional, actualmente se les dificulta poder conservarla debido a la pérdida de sus territorios patrimoniales y recursos naturales. Como componentes esenciales en el concepto de identidad del pueblo brunca están el juego de los diablitos, la creencia mítica de Cuasrán, así como la producción de artesanías a partir de técnicas tradicionales, en donde destacan como elementos representativos la elaboración de máscaras, principalmente las ecológicas, cestería con bejuco negro (Cydista pubescens), trabajos con el fruto del árbol de calabazos (Crescentia Cujete), textiles con materiales tradicionales y tintes naturales.
Los indígenas Boruca son el grupo que continúa siendo afectado por la sociedad dominante, que cada vez se acerca más a sus territorios por el desarrollo de actividades como la ganadería y el comercio. Todas estas influencias traen consigo una desvalorización y consecuente pérdida de las costumbres. Los intentos de usurpación también continúan, como fue el caso del proyecto hidroeléctrico Boruca, por parte del Instituto Costarricense de Electricidad, una fuerte amenaza contra la que lucharon y ganaron.
Carballo (s.f) establece la presencia de diversas personas e iniciativas que están fomentando la cultura boruca mediante proyectos para recuperar el idioma de la mano de la Radio Cultural Boruca, así como diversos grupos de mujeres y jóvenes que, en el contexto del desarrollo de la artesanía, han convertido a esta comunidad en un centro de atención turística en beneficio de comunitario.
A modo de representar la lucha y resistencia históricas de los indígenas Boruca frente a los conquistadores españoles, se lleva a cabo el juego de los diablitos. Nos gustaría que visualizaras el vídeo que aparece en pantalla que te ayudarán a afianzar tu aprendizaje. ¿Quieres verlo? ¡Pulsa sobre él!