Costa Rica se caracteriza por ser un país multicultural porque desde tiempos precolombinos contaba con una gran diversidad de pueblos indígenas. Posteriormente y por diferentes circunstancias otros pueblos indígenas y no indígenas de otras nacionalidades se han integrado al territorio, dejando su valiosa huella genética, lingüística y cultural, dotando al país de un valioso matiz multicultural y plurilingüe. Sin embargo, y a pesar de tan antigua riqueza cultural, el reconocimiento estatal llegaría hasta el año 2015 cuando se reforma el Artículo 1º de nuestra Constitución Política el cual indica que Costa Rica es una República democrática, libre, independiente, multiétnica y pluricultural.
Datos del Semanario Universidad (2017) destacan a la población nicaragüense como una de las que conforman socioculturalmente al país, en donde aproximadamente un 7% de la población de Costa Rica es de esa nacionalidad y, aunque alrededor del 5% de este grupo nació en Nicaragua y migró hacia nuestro territorio, también existe una gran cantidad de familias mixtas con hijos nacidos en Costa Rica. Sobre la conformación genética de la población costarricense el estudio realizado en el 2013 por el Centro de Investigación en Biología Celular y Molecular de la Universidad de Costa Rica determinó que los genes de la población costarricense son los siguientes.
Porcentajes y distribución de genes en la población costarricense | |||
Europea | Indígena | Africana | Asiática |
45.6% | 33.5% | 11.7% | 9.2% |
Fuente: Semanario Universidad, 2017.
Población mestiza
La población costarricense es mestiza, la genética nunca miente. Somos el resultado de procesos de mezclas iniciados desde el arribo de los primeros pobladores, seguidos en la conquista, la colonia, y posteriormente por migrantes que llegaron por voluntad propia o por diversas motivaciones como la búsqueda de un mejor futuro, huyendo de las guerras, las dictaduras, o como refugiados políticos, comerciantes, turistas, residentes o migrantes indocumentados, llevando a nuestra nación a la diversidad actual.
Hoy el país es más numeroso, más plurinacional y plurilingüe. La valoración de la diversidad cultural es muy necesaria, porque solo así podremos aprender a convivir, a reconocer nuestras diferencias y a crear una nación en la que no quepan la xenofobia, la homofobia, el racismo, la discriminación, ni la exclusión.