Interés y responsabilidad al

relacionar el sistema HACCP

como herramienta para la inocuidad alimentaria

El aumento en las enfermedades de transmisión alimentaria alrededor del mundo ha generado dudas sobre el interés con que las empresas, gobiernos e incluso las personas consumidoras han abordado el tema de la inocuidad.

 

Toda empresa que se dedique a la manufactura de alimentos se debe hacer responsable de la inocuidad y calidad de sus productos, protegiendo su posición en el mercado; pero aún más relevante, los intereses de las personas que adquieren sus productos. No obstante, cabe señalar que la responsabilidad de velar por la inocuidad de los alimentos cae en manos de todas las personas que participan en la producción y comercialización de los alimentos, es decir, tiene en cuenta a toda la cadena alimentaria.

 

En ocasiones, los problemas de inocuidad pueden provenir de la producción primaria y ser transferidos a otras etapas de la producción, distribución y comercialización de los alimentos.

Para que la salud y los intereses de las personas consumidoras estén protegidos, se requiere la cooperación de las organizaciones y personas involucradas en la industria de los alimentos; esta es una responsabilidad conjunta del Gobierno, la industria y las personas consumidoras.

Justamente aquí las normas juegan un papel importante, ya que estas procuran brindar lineamientos para garantizar la inocuidad de los alimentos y por lo tanto, es vital su cumplimiento. El HACCP ofrece muchas ventajas ya que es un sistema reconocido a nivel mundial, el cual se basa en fundamentos científicos y es compatible con varias normas internacionales.

Para que todo lo anterior funcione adecuadamente es clave la capacitación de las personas funcionarias brindando conocimientos pero sobre todo sensibilizar sobre la gran responsabilidad que poseen en sus labores cotidianas dentro de su lugar de trabajo. Para la implementación exitosa del sistema HACCP se requiere del compromiso de la organización.

El cumplimiento de un plan HACCP es de gran importancia tanto en la producción de alimentos que se realizan en instalaciones de vanguardia, como en  pequeñas empresas artesanales. El HACCP busca garantizar que la producción se encuentre controlada en todas sus etapas y que se impedirán, eliminarán o reducirán a niveles aceptables los riesgos para las personas consumidoras.

Para complementar lo aprendido en este recurso, le invitamos a revisar el siguiente vídeo, haga clic en el siguiente icono y analice la información, acerca del origen del HACCP: