
La investigación es un proceso sistemático, planificado y controlado, el cual permite generar conocimientos para la toma de decisiones acerca del comportamiento del mercado laboral, las posibilidades de innovación-competitividad, y la atención de las necesidades de capacitación y formación, actuales y futuras, de los sectores productivos.
La investigación puede utilizar como fuentes de información los resultados sistematizados de la vigilancia estratégica: leyes, decretos, políticas, programas gubernamentales e institucionales, estudios de mercado, intereses de cámaras empresariales, colegios profesionales, comités de enlace y regionales, así como información de mesas empresariales, estudios de instituciones y organizaciones educativas, o bien requerimientos de inversión nacional o extranjera, entre otros.