Un Sistema de Gestión Ambiental (SGA) es utilizado para manejar el impacto al ambiente de una organización, ya sea minimizándolo o bien eliminándolo, y ser más eficientes con respecto al consumo de insumos.
Se inicia con el compromiso de los altos mandos, el cual queda plasmado en un documento, por lo general de una página, conocido como la política ambiental, la cual se busca desarrollar e implementar, como parte de las actividades cotidianas del establecimiento de salud.
Los sistemas de gestión ambiental se basan en el modelo cíclico de planificar acciones, luego implementarlas (hacer), verificar los resultados de esta implementación y luego actuar con mejoras según lo verificado, y nuevamente se planifican acciones distintas o se da continuidad a las ya establecidas, según el siguiente diagrama:
La repetición de manera sostenida y eficaz de este ciclo conduce a la mejora continua de cualquier sistema de gestión en una organización.
Es indispensable para el correcto funcionamiento del SGA la participación y colaboración de cada una de las personas en la incorporación de prácticas ambientales en sus labores, y así disminuir los riesgos de afectar al ambiente y a personas involucradas con el EAS.
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