A diferencia de la redacción literaria donde se narran historias, cuentos, se expresan sentimientos, entre otros; la redacción de un documento técnico tiene una única finalidad: comunicar eficazmente los resultados de un trabajo realizado. Para lograr la comunicación eficaz de los hallazgos de determinada inspección laboral no es necesario tener una destreza especial, ya que se trata de una habilidad que se puede aprender, aunque son necesarios algunos requisitos previos, como el dominio del idioma. La construcción de textos coherentes y bien relacionados, así como el conocimiento de las reglas ortográficas son un requerimiento necesario para adquirir las competencias necesarias en la redacción científica-tecnológica.