Cuenta con un proceso de certificación sencillo, ya que únicamente requiere una auditoría in situ, sin necesidad de realizar ningún estudio técnico adicional.
El estándar IFS fue originalmente desarrollado por una asociación de comercios minoristas alemanes como alternativa al estándar BRC, y los principales comercios minoristas de Alemania, Francia, Italia y muchos otros países de la Unión Europea quienes exigen a sus proveedores el cumplimiento del estándar IFS
Objetivo del IFS:
Ofrecer una garantía de calidad y un estándar de seguridad alimentaria a los productos vendidos al por menor. Mediante un sistema de evaluación y procedimientos de auditoría, el estándar genera transparencia en toda la cadena de suministro, a la vez que garantiza el cumplimiento de la normativa aplicable y protege a los minoristas y mayoristas de responsabilidades.
El estándar IFS:
Proporciona una variedad de controles integrados en relación con la seguridad y la calidad alimentaria en las empresas que procesan alimentos.
Cubre las diferentes variedades de productos y
Ofrece certificaciones en todo el espectro de procesado de alimentos, con la excepción de la producción agrícola primaria.
El estándar IFS cubre toda la cadena de suministro con tres estándares relacionados:
a) Estándar alimentario IFS
El IFS Food es un estándar para la realización de auditorías a empresas que procesan alimentos o a empresas que empaquetan productos alimentarios a granel. El IFS Food sólo se aplica cuando el producto es “procesado o tratado” o cuando existe peligro de una contaminación del producto durante su primer empaquetado.
b) IFS Broker
El IFS Brokers se aplica en aquellas empresas que ejercen principalmente una “actividad comercial” y que escogen ellas mismas a sus proveedores, compran y comercian con mercancía y después la envían directamente a sus propios clientes, a quienes también se la cobran directamente, sin ellas haber entrado nunca en contacto con el producto.
c) IFS Logistics
El IFS Logistics se puede aplicar tanto a productos alimentarios, como a productos no-alimentarios y cubre todas las actividades de logística como la carga, la descarga y el transporte. Este estándar es aplicable a todos los medios de transporte; camiones, trenes, barcos, aviones y cualquier otro medio de transporte, ya sea con condiciones de temperatura controladas o a temperatura ambiental.
