6. La junta y la chichada 


Son tradiciones y a la vez formas de intercambio de trabajo comunal, entre las poblaciones Bribris y Cabécares, que hacen durante labores agrícolas como “voltear” montaña y cortar un tacotal, las cuales requieren de mucha mano de obra, por lo cual se invita a colaborar a amistades y familiares. Desde tempranas horas de la mañana, los hombres de la comunidad llegan hasta la casa de quien convocó la junta y les ofrece desayuno y chicha para que obtengan energía, a la vez para que afilen los machetes. Mientras se realiza el trabajo, las mujeres reparten la chicha y al final de la faena regresan a la casa, donde nuevamente se reparte chicha en abundancia, lo mismo que comida. Se finaliza la actividad con un baile de toda la noche, donde todas las personas participan y se afirman los lazos de unión en la comunidad. La chichada sigue siendo una buena muestra de sociabilidad y solidaridad, así como la mejor ocasión para compartir, expresada por los pueblos indígenas de Costa Rica.