Diagrama de temas
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Los 3 componentes básicos de un semillero de hortalizas son los siguientes:
1. Semilla de calidad:
La semilla es uno de los componentes más importantes en la preparación del semillero. Por tal razón es conveniente adquirir semilla de hortalizas de buena calidad, sana, buen vigor, y alto porcentaje de germinación.
La semilla de hortalizas está formada por un embión, tegumento o cáscara y uno o dos cotiledones.
Cuando se activa el proceso de germinación (en presencia de agua), el tegumento se rompe y el embrión inicia su crecimiento formándose la futura raíz (radícula) y la parte aérea (plúmula), de la nueva plántula. Los cotiledones son estructuras de reserva de alimento (almidón), que nutren al embrión durante los primeros días de crecimiento.
Para que ocurra la germinación tiene que existir una condición de humedad (presencia de agua), temperatura adecuada (varía de cultivo a cultivo), y generalmente una condición de oscuridad.
Adquiera semilla en comercios agrícolas o agroservicios de confianza, donde se manipule y almacene de forma correcta. Preste atención de que este empacada preferiblemente en sobres de papel aluminizado y sellado. Además revise las fechas de vencimiento. La semilla vieja pierde el vigor y la capacidad de germinar.
De cada tipo de cultivo se comercializa varias variedades o híbridos. Es necesario que seleccione aquellas aptas para la zona de producción y que corresponda a los gustos y preferencia del consumidor.
Cuando tenga duda sobre la calidad de la semilla que está utilizando en el semillero, puede practicar una prueba de germinación para semillas de hortalizas.
Consulte al final de esta página: LA GUIA-PRUEBA DE GERMINACIÓN PARA SEMILLAS DE HORTALIZAS.
En los últimos años se ha experimentado un interés por la producción propia de semillas de variedades locales o aclimatizadas, también llamada producción artesanal o criolla.
Se brinda varios links al final de esta página de libros sobre producción artesanal de semillas de hortalizas donde puede accesar y profundizar en este tema.
2. Sustrato adecuado:
Los semilleros se pueden hacer utilizando sustratos importados, locales o empleando abono orgánico, en la mayoría de veces empleando una mezcla apropiada entre estos.
Siempre debe buscarse un sustrato que brinde las mejores características físicas, químicas y biológicas, que faciliten una óptima germinación de la semilla y desarrollo de la plántula.
Debido a que la mayoría de semillas de hortalizas son de tamaño pequeño, el sustrato debe tener una textura (tamaño de las partículas) adecuada para que la semilla logre germinar adecuadamente. Además debe permitir un excelente contacto entre ambos (semilla-partículas), lo que favorece la adecuada absorción de agua y nutrientes.
Los sustratos son materiales orgánicos o inorgánicos, utilizados como soporte de las plántulas en las bandejas. Generalmente se emplean mezclas probadas como la comercial-importada, turba con perlita (peat moss) y fibra de coco compactada importada, o sustratos locales como fibra de coco molida, carbón vegetal fino, granza de arroz (fermentada o carbonizada), aserrín de maderas blancas fermentada como la melina. También se utilizan sustratos para uso en semilleros orgánicos como los abonos orgánicos ( bocashi, vermicompost y compost) en mezclas con sustratos locales.
Para la preparación de bandejas para la siembra de semilla, se requiere de sustratos que retengan humedad y a la vez que permitan una buena aireación.
La producción de plántulas sanas y vigorosas depende básicamente de una adecuada desinfección del sustrato. El sustrato a utilizar debe pasar por un proceso de desinfección, ya que existen hongos, bacterias, nematodos, insectos y arvenses que pueden afectar la semilla, fase de germinación y desarrollo de la plántula. En el caso de los hongos el mal del talluelo (complejo Fusarium, Phytium, Rhizoctonia, Phytopthora) es uno de los principales problemas que se presentan a nivel de semillero, causando graves pérdidas económicas.
Puede consultar al final de esta página el documento en PDF-Sustratos para Uso en un Semillero de Hortalizas: Mezclas y Métodos de Desinfección
3. Bandejas plásticas con celdas o cavidades:
La bandeja plástica con celdas o cavidades es el método más utilizado en la preparación de semilleros de hortalizas. En el mercado existe una amplia gama de tipos de bandejas donde varía el tamaño y número de celdas, según el fabricante. El material más utilizado es el polipropileno y con respecto al número de celdas las más utilizadas son las bandejas de 128 y 200 celdas. Las mismas pueden ser reutilizada varias veces siempre y cuando se haga un buen lavado y desinfección.
Algunas otras opciones a pequeña escala son los cartones de almacenar huevos, vasos plásticos, cajitas para comida rápida, cajas de cartón, etc.
A continuación se indica el tipo de bandeja a utilizar según el porte del cultivo.
-Bandejas de 200 celdas: Para utilizar con hortalizas de porte bajo como lechuga, cebollino, cebolla, acelga, kale, rúcula, repollo, coliflor, apio, pack choi.
-Bandejas de 128 celdas: Para utilizar con hortalizas de porte alto como chile dulce, tomate, pepino, zuquinni, sandía, melón.
-Bandejas de 98 -128 celdas: Para utilizar con culantro de castilla, donde se colocan entre 6 a 8 semillas por celda.
EN RESUMEN, ESTOS SON LOS DOCUMENTOS RELACIONADOS CON ESTE TEMA No. 3 (COMPONENTES BASICOS DE UN SEMILLERO DE HORTALIZAS). DE CLIC EN EL DOCUMENTO QUE DESEE REVISAR